sábado, junio 21, 2014

Borrae

Te avisé
Bajo la autopista
Bajo el sueño profundo
Hacen gárgaras idiotas
Eternas
Los hermanos bovinos

Guerras de nieve y jinetes
Cansados de renacer
Se refugian en el bosque amarillo

miércoles, junio 11, 2014

Sirenas

¿Dónde es que las sirenas se apagan,
que las tibiezas del medio, de la mente
olvidan las palabras, y el mediodía
pierde el miedo al mar?

¿Dónde existe aquel instante
en que la hipocresía
se muerde el labio
se deja las canas
se rompe en cristal?

¿Dónde la simiente negra
pierde el valor
y el alma entera
se sulfata de luz
de calor animal?

¿Dónde el silencio
se mata a palazos
y en el grito oblicuo
espeso, profundo, eterno
revienta en canciones
de rojo candeal?

¿Dónde se terminan los recuerdos
que nos atan a la misera ceniza
a la quietud sepulcral?

¿Cuando termina el tiempo
y empieza algún lugar?

miércoles, mayo 07, 2014

Faunas

Había una bestia furiosa entre tantas otras
y todos los viernes, lunes y domingos
te aclamaba a vos, Marcel,
quería comer

No se acercaban ni el tero ni el escorpión
a ese bosque hermético de palabras y tactos
con mentes troqueladas,
faunas asesinas
gargantas elípticas,
silencios de saliva

Sabíamos que te invitaba a sortear la mediocridad
y la promesa de lo infecundo
Sabíamos que con guante en la mano,
no ibas a aguantar

Tené cuidado Marcel,
Temé por tus días
Siempre te decíamos,
diezmados de tanto hablar

Te encontrábamos en cada esquina
pero estabas como ebrio de empezar
mientras,
la voracidad implacable de consumo, hierro
y ningún final
miraba inexpugnable
la síntesis de tu soñar.

martes, abril 22, 2014

En tu nombre de mujer

Impreciso de silencios, corto como el tuétano
contempla tu nombre de mujer su propio espectro
El falso sol que un día nos impusieron
ya no te recorta esos hoscos espejos perversos
y las sombras sobre tu espalda se han perdido
entre tus sueños blancos por excesos ajenos

Habías ejercido pocas cosas y ese misterio de voluntades
se te iba tornando compacto, predecible carcelero
Asperos tejidos quemados por la mirada y el viento
-un viento que te encontraba desnudo en desnudo lamento-
te escudriñaban como un faro oculto en cada noche

Tormentas en combustión con el puño cerrado
banderas de ternura que, a otros, habías enseñado
no fueron suficiente cuerpo para un mundo
tieso por dentro

La risa del color infinito, tu fuego ¿prometeico?
se dio otra vez forma, y se congujó a sí mismo.
Fue un escándalo de infiernos sinceros
tosía arenas asimétricas la botella del miedo
                                                    [Pero
Tu voz no podía hablar desde el reflejo
aunque nos vivías diciendo.
                                                   [Creo que
nunca me importó, pido perdón,
me arrepiento a destiempo.
                                                   [Ahora,

Sólo siento que te mataban por dentro,
mientras contemplabas tu nombre de mujer,
sólo siento que también vos te morías
mientras contemplabas tu nombre de mujer,
sólo siento que ya no estás muerta

mientras contemplemos tu nombre de mujer.

sábado, abril 05, 2014

Ritmo impaciente

Siempre que exista
solo será un instante
donde lo valiente,
lo inmenso y lo eterno
sacudan el verso propio
la mordedura de los tiernos
verdaderos como la indecisión

Donde no viva el silencio,
donde no nazca la creación
y ella sea tan extensa, infinita
que los ecos del abismo
los que paralizan las manos
y nos dan de a poco, pedazos
revienten en temblor

vientos austeros fugaces
momias de perdigón
figuras de vuelos  rapaces
amigos sin corazón

Como si el ritmo de los diarios
corriera con semejante razón
los carneros mueren tranquilos
cuando alguien nombra cierto Dios

Y los hijos inhibidos
de todo lo que tronó
terminaron mudos y tiesos,
gritaban como el fuego mismo
de aquello que gimió
la cercanía insurrecta
de la noche junto al sol.

jueves, abril 03, 2014

Viajeros

Puro viento y puro polvo
forman los senderos
por donde andan, lento
azules bueyes de algún sueño

Pisando fuerte en seco
un largo invierno
les amaina las hojas
les olvida los días

Acurrucados del temor
se pierden sonámbulos
en lo oscuro del cielo
ceban mate de lo ajeno

Sin señales y sin humo
son cazados uno a uno
devorados por el hambre
por el hombre, el recuerdo

Los rubores se retiran
tras pieles duras y erizas
invasiones de mosquitos
no perdonan ni a la vista

No devuelve ya la tierra
esa mística sonrisa
que antes convidaba a seguir
con amor pero con prisa

Pesan ya los mismos pasos
que se fueron caminando
somos bueyes no caballos
seguiremos pues marchando

martes, enero 21, 2014

Pacificar.

Tras el asma de los pájaros
Tras la lluvia de pescadores y viajeros
Tras el dolor de haber descubierto todo
Tras haberlo perdido en el intento
Tras la espera de alacranes
Tras el silencio de las marea

Rompe el huevo la serpiente
y remonta vuelo como gaviota
chocando contra un sueño incandescente
Miran atentos los ojos secretos
donde la tierra amarilla
surca todas las pieles

Fuego que moja y seca
mientras nuestros muertos
siembran lo que es de otros
De lejos se oye una señal
ecos de ratas peladas
en cada una de las montañas

No hay más asfalto que la arena
la noche baja desde la selva
Un invierno de lunas llenas 
Santa Cecilia reza morena
"On peux vivre d'amour
et d'eau fraîche"