lunes, mayo 07, 2007

Peldaños a lo M.C. Escher

Aprendí del espejo la soledad
aprendí del olor a sangre
a buscar heridas,
aprendí de la muerte a no ser tan viejo,
aprendí del fuego
el calor de los cuerpos,
aprendí a rasguñar la vida
en callejones sin salida,
aprendí del mar, el día y la noche,
(en las sombras la estupidez),
aprendí que el amor vale nada,
aprendí que el amor vale todo,
aprendí de las copas
a olvidar lo que aprendí,
aprendí del perfume el aroma del viento,
que los besos son en los huesos,
que el sabor de mi alma
está hecha de ceniza,
aprendí de los libros
a vivir en los puertos,
aprendí del asfalto
a mantenerme despierto,
aprendí que los sueños
nunca te dejan despertar,
aprendí en las nubes
a buscar un reflejo,
aprendí de los enemigos
a buscar más amigos,
aprendí que el corazón
siempre late a destiempo,
aprendí de la cobardía
a ser un poco más suicida,
aprendí en los trapecios
a buscar equilibrio
aprendí de los viajeros,
que nunca voy a ningún lado,
aprendí tanto
-y al fin y al cabo-,