martes, diciembre 09, 2008

Anónima

Había un espejo.
cien mil figuras
cien mil estrellas
todas acomodadas
un cielo superpoblado

Ah, y la luna en el medio
a codazos, sentada.
Y la tierra
y el mar,
y la furiosa mirada
y el hervor de los asfaltos
y el ritmo imparable

oscilando
el péndulo bajo el horizonte,
el entenado sobre el ratón

y dentro, la soledad.

Pero estaba vacío
en realidad.