jueves, diciembre 31, 2015

El almacén del crepúsculo

Me invitas muchacha soñadora
al almacén del crepúsculo.
Vive allí tu pueblo íntimo
sin fiebres ni feriados.

Me invitas muchacha soñadora a
"gozar lo que se pueda gozar"
y hacer con nuestro paso que la tierra tiemble.

Rimas ficticias, fechas inciertas
Finales.

Me invitas, muchacha soñadora,
por caminos empedrados
a toda velocidad,
caminos que envuelven 
de llanto tus misterios.

Muchacha soñadora:
una vez conocí a un taxista
que amaba cambiar de radio
y a viejos huraños
que rebobinaban cassettes,
en sus cartas de amor.

El miedo es una fantasía,
una fantasía imposible,
muchacha soñadora;
vos que siempre supiste 
mi saber no sentirme nada.

Y una jauría nos persigue,
muchacha soñadora,
pero nadie me enseñó a correr
y perdidos en el silencio infinito,

te sigo.

lunes, septiembre 14, 2015

Anónima II

Contemplar la belleza
Criarla desde pequeña,
como una gota de lluvia
se evapora, arremolinada
en doce anillos
Sujetados fuertes unos
Con los otros
No se sueltan, aferrados
A la hermandad más profunda
La que no necesita mirar a los ojos
Para ver el color que reflejan
Todos los océanos
Y existe allí ese mundo fugaz
Animales que no saben de bien
Ni de mal
Y por tanto son sabios
Porque no conocen de la vejez
Más que lo que hace andar despacio
La juventud como un juego inquieto
Que atesora el amor
Descubre los sexos calientes
Las sonrisas verdaderas
Susurran canciones
Crecen
Hasta ser el canto de todos
Una sola mano, un sólo grito
Que se hace melodía, y quiebra
El pasado
Por su grieta, camina erguida la memoria
Mas no castiga, sino que acaricia
Como el agua a la sed,
Al cuerpo desnudo en el silencio
De un día que fue luz
Todos los niños brillaban
Sus dientes blancos como la luna
De una noche que fue larga
Pero hasta el más perezoso baila
Si se embriaga el alma
Remontando en un vuelo
Se sube al sol y lo amanece de nuevo
Para contemplar la belleza
Ser toda esa belleza
que tímidamente habita
lo que es valiente
y que por ser valiente
no tiene nombre
pero nos llama
siempre
a luchar por ella.

martes, agosto 04, 2015

Cielo

En un rincón
vive un cielo gris
y por más que intento
no deja de ser gris

Lo invito a jugar
conmigo, con todos
pero cosido al firmamento
no se nos quiere acercar

Tiene miedo, pánico celestial
babéandose encima
llora,
y llora,
casi como cualquier animal



Beso de adrenalina

Estoy yendo a matar
Y el suelo que camino
Nunca estuvo más sereno, pausado
Toda la melancolía que gravita
Me cae al lado, tiesa
Porque estoy yendo a matar
Las luces como simples chispas opacas
Sirvientas pobres de la mirada de algun hombre
No pueden ver absolutamente nada,
Son colores oxidados por la humedad
Que corroe, que es agua que infecta
Todo lo que no esta vivo
Pero yo estoy yendo a matar,
No una montaña, no un sonido,
No una idea, un suspiro,
O un silencio, o un acertijo.
Te estoy yendo a matar.
Fijo el horizonte en una esfera
A la espera
un beso de adrenalina
Profundo, húmedo
Que te revuelva las entrañas
Con un golpe seco
Me gusta eso
tener tu enunciación
Un poema cargado
de destinos ocultos
Tomarte cálida
entre mis brazos,
Nuestros brazos
Como un perfume, tu aliento
Que mis manos penetran
Y sostengo tu póstuma mueca
Latiendo entre mis manos
Se derrama en tus ojos
Cada silencio en vida
Cada culpa amarga
Mientras ves el cielo,
Igual de fotogénico,
Igual que siempre
Porque no sabés que
Te acabo de matar.
Y me transformo en potencia
En facultades divinas
Estoy al lado de todos
de tu silencio, de tu mueca,
de tus brazos sueltos,
si ahora los habito
si ahora los quiero,
¿Por qué será

que ya no los siento?

miércoles, junio 10, 2015

Los días

Por un lado, los días
en los que se bosteza
se guardan las manos en los bolsillos
algún idiota se insulta con otro idiota
las cosas permanecen en un movimiento
en un movimiento mentiroso
y a los niños se compra caramelos
y alguien que no se sonríe
y son varios

Quizá también los que se cruzan de calle
con el tiempo colgando de la mente
y de la muñeca
El sol sale un poco más, ¿cómo medirlo?
amarras de locura, un astro que late
¿quién lo escucha?

Es un sueño de perros
prohibido asomarse al cielo
prohibido habitar otro cuerpo
prohibido, de esos días
en que hombres, extraños y mujeres
se cubren sus cabezas con sombreros
con misiones providenciales
del polvo a la nada,
no existe reflejo para la mirada.

Del otro lado, los días
en los que amamos, sanamos, confiamos,
encontramos, besamos, perdemos
(sí, perdemos)
luchamos, cantamos, callamos (para oír),
fumamos, sufrimos
profesamos, miramos,
nos miramos,

y también esos en los que morimos
pero de muertes tan nuestras
que a la vida
no da sentirle envidia
yacemos en la arena,
bañados en el agua del mar.

lunes, mayo 11, 2015

Parques

Se había cansado el espanto
de toser en cuatro tiempos
Los hijos del kerosén y la saliva
descansaban tiesos entre almohadas
apagados, los días,
miraban un cielo fugaz
Errando, perdido en una fábula
cogía el verdadero amor
con tanta afasia
de adornada fantasía
y los cortes que ya no dolían
y las venas que no viajaban más
y los últimos sonidos
se olvidaban el cantar

Mas

Con las luces de la primera noche
los pasos empiezan a acelerar
la fruta de un cuento limpio
permanente, quieto, natural
junto a unos criterios perdidos
que ponen en perspectiva ya
prácticamente nada, ya
escupen letras
y se vuelven a mezclar

Un parque nuestro se configura
redondo sobre esta hoja en blanco
De pisadas tercas, hombres y mujeres
empiezan a asomar
Una jungla tan austera, inútil
que los espera con navajas de cristal

Con una sonrisa abierta
entre tanto fingir, deambulan
presas del sudor y del espanto
Habitan otro tiempo
grillos verdes, sombras
estiran sus brazos
siempre para abrazar
manos que se tocan, que sienten,
adalides de la dicha repentina
y servidores de un futuro por crear.

Se ve fuera del parque
la residencia secuencial
La velocidad es el misterio
es el eco, que los llama
es la madre veneno, la ansiedad

Seguirán los circulares,
Una vuelta,
otra,
y otra más.
Seguirá a plena vida
escondido ese refugio
Seguirá siendo de barro
El camino de verdad

jueves, marzo 05, 2015

Silvestre paciencia

Te pienso infinita y absurda
Te pienso lejos
Te pienso entre las muelas
Entre cuando tengas un momento
de silvestre paciencia
como pobre que espera
una mirada ajena

Te pienso sola, en figuras selectas
Evidente táctica
Abrupto avatar de la consciencia
Te pienso desconocida, perdida en la marea

Un día
de bruma espesa, 
-satírico como muchos otros-,
te vi hermosa e idéntica
con pavorosa plenitud
de viento nuevo,
mirada inquieta

Sabías el nombre de cada estrella
pedacitos de alfombras
eran cuevas donde esa voz,
de vivo cuento,
mantenía en cada palabra
el amor y el misterio.

Te pienso hermosa, y me molesta
porque cada día que te pienso
borro tus ojos, tus muecas,
escupo ese aliento
odio tu cuerpo, tu desnudez
reinvento tu sexo
Carroño tu piel
tu carne
y mato tu vientre
con hediondo veneno.

Te pienso ¿libre?
eso me queda

Te pienso
eso me queda.

sábado, enero 31, 2015

Almohadas de plumas

Somos hijos idiotas del misterio
a pura sangre rancia
miseria vestida y desvestida
junto al imperio de la palabra
Ese maldito verbo conjugado
sobre una almohada de plumas
sobre un cuerpo desnudo
y la lluvia más perfecta
donde el poeta indeciso
suspira el eterno suspiro
el que nos invita a tocar
Macizos
Diestros
Oscuros
Sabe el silencio que no consuela
Pajaros que aletean infintos círculos
y un par de ojos que invitan a jugar
pero si la vida es agua
Somos estatuas de sal,
esperando la rompiente
un gesto sorpresa que nos sostenga
y nos empuje
que nos mate de verdad.